¿Puedo llegar a un acuerdo con el banco si no puedo pagar la hipoteca?

Si no puedes pagar la hipoteca o si tienes dificultades económicas, puedes solicitar a tu banco que aplique una moratoria a tu préstamo.

La Moratoria Hipotecaria es un instrumento que empezó siendo usado por el Gobierno para mitigar los efectos de la crisis del COVID, y al que más a delante se unieron las entidades bancarias.

Actualmente, sólo se puede solicitar la moratoria que conceden los bancos, por lo que los requisitos para acceder a ella no están establecidos por ley y son menos estrictos.

¿En qué consiste una Moratoria?

Una moratoria hipotecaria es una carencia de seis o doce meses durante los cuales sólo se pagan los intereses del préstamo.

Puede solicitarse tanto para la vivienda habitual, como para el local en el que se ejerza la actividad comercial, y en los préstamos de consumo.

¿Están los bancos interesados en conceder moratorias?

La respuesta es rotunda, SÍ.

Los bancos están interesados en conceder moratorias por varios motivos, en primer lugar porque ejecutar una hipoteca y desalojar una vivienda o un negocio conlleva muchos costes. A parte de los costes de reputación, jurídicos y procesales, el banco debe provisionar al Banco de España el valor de la hipoteca que va a ejecutar, por lo que hacerlo le sale al banco muy caro.

El siguiente motivo es porque el banco no te está regalando nada, de hecho sigue cobrando intereses y sigue teniendo cautivo al cliente durante seis o doce meses más, y si además uno ha contratado una hipoteca a tipo variable, teniendo en cuenta que actualmente el Euribor está en negativo, se le está dando plazo al banco para poder cobrar más intereses en el futuro.

Por lo que en caso de que no puedas hacer frente a la hipoteca debes ponerte en contacto con el banco, ya que pueden facilitarte mediante una carencia el pago de la deuda dejándola en suspenso (salvo los intereses) durante un periodo de seis o doce meses.

Además, tal y como informa el Real Decreto que articula la concesión de moratorias, es el banco el que debe correr con los gastos de inscripción en el registro. Por lo que no van sobre el consumidor ningún gasto.

Foto de Ono Kosuki en Pexels